Foto Skyview Company, cortesía de la Autoridad de Antigüedades de Israel
Arqueólogos de Israel descubren una cantera de más de dos mil años
Una cantera de más de dos mil años fue desenterrada al noroeste de Jerusalén. Las primeras investigaciones concluyen que se usó para la construcción de edificios entre el 500 a. C y el año 70 d. C., tiempo que llaman del Segundo Templo.
La Autoridad de Antigüedades Israelí (AAI) hizo el anuncio de esta excavación en donde también se encontraron los utensilios que se usaban para cortar las piedras, hay artefactos de más de dos metros de longitud y reliquias como una llave de casi 2000 años.
La directora de la excavación, Irina Zilberhod explicó que al parecer las piedras fueron usadas para construir edificios públicos de la ciudad.
"Algunas de las piedras que se extraen son más de 2 metros de largo. Las piedras gigantes probablemente se usaron por el bien de la construcción de magníficos edificios públicos de la ciudad". Sobre la llave encontrada bromeó la arqueóloga: "Hace dos mil años, alguien no pudo entrar a su casa luego de salir del trabajo" (…) "La llave que se encontró seguro se utilizó para abrir una puerta hace unos 2.000 años, está curvada y tiene dientes. ¿Qué estaba haciendo allí? Sólo podemos suponer que podría haber caído del bolsillo de uno de los canteros".
Se especificó que el tipo de roca de la zona es conocida como meleke, una clase de piedra caliza que permite cortarse.
Además la zona norte es topográficamente más alta que la ciudad de Jerusalén en la época del Segundo Templo, y por eso se supone que las piedras eran más fáciles de transportar, aunque algunas de estas pesaran cientos de toneladas. En el hallazgo se ve un camino antiguo, al lado de la cantera y que data de la época del Segundo Templo, es probable que por allí se movieran las piedras grandes.
La Autoridad de Antigüedades Israelí (AAI) hizo el anuncio de esta excavación en donde también se encontraron los utensilios que se usaban para cortar las piedras, hay artefactos de más de dos metros de longitud y reliquias como una llave de casi 2000 años.
La directora de la excavación, Irina Zilberhod explicó que al parecer las piedras fueron usadas para construir edificios públicos de la ciudad.
"Algunas de las piedras que se extraen son más de 2 metros de largo. Las piedras gigantes probablemente se usaron por el bien de la construcción de magníficos edificios públicos de la ciudad". Sobre la llave encontrada bromeó la arqueóloga: "Hace dos mil años, alguien no pudo entrar a su casa luego de salir del trabajo" (…) "La llave que se encontró seguro se utilizó para abrir una puerta hace unos 2.000 años, está curvada y tiene dientes. ¿Qué estaba haciendo allí? Sólo podemos suponer que podría haber caído del bolsillo de uno de los canteros".
Se especificó que el tipo de roca de la zona es conocida como meleke, una clase de piedra caliza que permite cortarse.
Además la zona norte es topográficamente más alta que la ciudad de Jerusalén en la época del Segundo Templo, y por eso se supone que las piedras eran más fáciles de transportar, aunque algunas de estas pesaran cientos de toneladas. En el hallazgo se ve un camino antiguo, al lado de la cantera y que data de la época del Segundo Templo, es probable que por allí se movieran las piedras grandes.